Ba Abbas, que en paz descanse, fue una figura excepcional en el pequeño mercado durante los años cincuenta. Con sus manos fuertes y una profunda paciencia, preparaba el "kif" para los clientes, transformando las plantas crudas en un producto listo para ser fumado en el "sibsi". No era simplemente un artesano haciendo su trabajo; era un artista que creaba un ritual de sencillez y belleza en cada momento que pasaba con sus clientes.
Conocido por el apodo de "Kinko", vivió su vida entre el comercio y el servicio, dejando su verdadera huella en los sonidos del pequeño mercado y en la calidez de las transacciones diarias. En su juventud, dominaba el corte y la preparación del kif, pero con el paso de los años, se dedicó a la venta de chatarra. Como si quisiera decirnos que la vida tiene etapas y que las personas desempeñan distintos roles, algunos pasajeros y otros eternos en la memoria de quienes los conocieron.
A pesar de que su actividad comercial cambió, su bondad y cercanía con la gente permanecieron constantes. No cambió su noble corazón ni su mano siempre extendida. Ba Abbas nos dejó una lección profunda de humildad y trabajo honrado, y una historia parecida a muchas otras que no están escritas, pero que quedan grabadas en la memoria de todos los que pasaron por el pequeño mercado.
Que en paz descanse y que Dios lo tenga en su gloria.
لقد كان باعباس، رحمه الله، شخصية استثنائية في السوق الصغير خلال خمسينات القرن الماضي. كان، بيديه القويتين وصبره العميق، يعد "الكيف" للزبائن، حيث يحول نباتاته الخام إلى منتج صالح للتدخين في "السبسي". لم يكن مجرد حرفي يؤدي عمله، بل كان فنانًا يخلق طقوسًا من البساطة والجمال في كل لحظة يقضيها مع زبائنه.
كان يُعرف بلقب "كينكو" وعاش حياته بين التجارة والخدمة، وبين أصوات السوق الصغير ودفء المعاملات اليومية، ترك بصمته الحقيقية. في شباب، كان يتقن تقطيع وتجهيز الكيف، ولكن مع تقدم السنين، انتقل إلى بيع المتلاشيات الحديدية. كأنه يقول لنا إن الحياة مراحل، وإن الإنسان يمر بأدوار عديدة، بعضها عابر وبعضها خالد في ذاكرة من عاشروه.
وعلى الرغم من أن نشاطه التجاري قد تغير، فإن طيبته وقربه من الناس ظلا ثابتين، لم يتغير قلبه الطيب ولا يده الممدودة. ترك لنا باعباس درسًا عميقًا في التواضع والعمل الشريف، وقصة تشبه قصصًا عديدة لم تُكتب، لكنها محفورة في ذاكرة كل من مروا بالسوق الصغير.
رحمه الله وأحسن مثواه.
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire